miércoles, 9 de septiembre de 2009

Epílogo

Otro año más la aventura ha terminado y toca volver a la realidad y hacer balance de lo vivido en estos días.

COMPARANDO CAMINOS
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Al igual que el año pasado el balance es indudablemente positivo y claramente recomendable. Sin embargo al tener la experiencia previa del camino francés puedo hacer algunas matizaciones.

1) EL TRAZADO
En lo que se refiere al camino en sí poco se parecen uno y el otro. El camino francés es el camino de Santiago por excelencia y a lo largo de su recorrido atraviesas lugares llenos de historia, cultura, arte y otros que rebosan magia y místicismo (como el monte del perdón o la cruz de hierro). Por contra el camino primitivo es pura naturaleza y paisaje galaico-asturiano donde durante días sólo ves corredoiras, senderos y pequeñas aldeas o como mucho poblaciones de pocos miles de habitantes. Es un encuentro con la Asturias y Galicia más rural y tradicional. No hay hitos clave en el camino salvo el desafío físico de los puertos de montaña y la muralla de Lugo patrimonio de la humanidad.

2) LOS PEREGRINOS
En cuanto al peregrinaje en sí también las diferencias son abismales. El camino francés está plagado de peregrinos desde su comienzo en tierras galas y en torno a él ha surgido toda una industria del camino: cientos de albergues privados y pensiones, servicios de coches mochileros, tiendas con artículos orientados al peregrino (botas, mapas, linternas, etc.) y en general todo lo que un peregrino pueda necesitar. El camino primitivo es mucho menos transitado y por lo tanto explotado comercialmente y dotado de infraestructuras. Aquí los albergues son escasos y con capacidades reducidas obligando al peregrino a planificar bien sus etapas ya que en la mayoría de ellas no encontraría alojamiento en 20 o más km. Una esterilla y un saco que permita dormir en exteriores se hacen elementos recomendables en nuestras mochilas.

3) LOS BICIGRINOS
En lo que respecta a los bicigrinos los dos caminos son también muy diferentes. Cualquier persona puede ir al francés en bici practicando un poco un par de semanas antes. Sin embargo para enfrentarse a las pendientes del primitivo recomiendo tener algo de experiencia en btt y conocimientos de mecánica de bicicleta ya que debido al terreno las averías de nuestra montura no serán improbables.

EL EQUIPAJE
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Tras dos caminos también me voy a atreverse a dar alguna recomendación sobre algunos aspectos del equipo que a los que nunca hayan hecho el camino igual no resultan obvios.
- Bridas: Te pueden salvar de más de un apuro. Más vale que sobren que no que falten.
- Pulpos: Te permitirán sujetar casi cualquier cosa al equipaje y con un poco de imaginación le encontrarás múltiples usos. Por ejemplo a nosotros nos sirvieron de improvisados tendederos.
- Repuestos básicos para la bici: Quedarse aún pastillas de freno o romper un cable de cambio un sábado por la tarde o a muchos km de una tienda especializada puede suponer un grave trastorno en nuestro viaje. Recomiendo también aceite, una patilla de cambio y un eslabón de enganche para la cadena.
- Pinzas para colgar la ropa: Tenemos que llevar el mínimo equipaje lo que nos obliga a lavar la ropa a menudo. En muchos albergues escasean las pinzas.
- Cuchara y tenedor: Aunque sean de plástico suplirán la carencia de muchos albergues y nos permitirán disfrutar de placeres como tomar unas natillas.
- Funda de almohada: Tendremos que compartir la misma almohada que cientos de personas más. Para mi fundamental

HASTA LA PRÓXIMA
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Espero que con este epílogo haya ayudado alguna posibles bicigrinos a escoger el camino que más se adapte a lo deseado. Personalmente estoy muy contento de haber hecho ambos y creo que el orden fue el correcto.

Al igual que dije el año pasado aunque el camino haya terminado y hoy regrese a casa para colgar las alforjas de bicigrino un peregrino es como un exfumador, a la mínima tentación volverá a su adicción y yo creo que el camino es una maravillosa y saludable adicción que no quiero dejar. Este año no dejo ya preparado el blog para el siguiente pues al ser año santo el camino estará saturado y no me atrae la idea de hacerlo así pero como dije antes ya se verá sí surge y entonces seguramente no podré resistirme.

Un gran abrazo a todos los que con vuestros mensajes o llamadas nos habéis transmitido vuestro ánimo.

Ultreia ét suseia

lunes, 7 de septiembre de 2009

Etapa 6: Melide - Santiago (55 km). Y van dos

Pues aquí estamos en Santiago de nuevo. Aunque con más esfuerzo que el año pasado el reto ha sido superado y la alegría y satisfacción personal llenó nuestros corazones.

Es verdaderamente emocionante estar en la plaza del Obradoiro y ver la expresión de felicidad en la cara de los peregrinos que van llegando a la plaza. En esos momentos uno se siente parte de un grupo que aunque nunca se haya visto antes está sintiendo la misma emoción. Es conmovedor reencontrarse con algunos peregrinos en bici con los que nos cruzamos en algún punto del camino y te saludan y felicitar como sí hubierais crecido juntos. Realmente es una sensación que creo que todos deberíamos sentir al menos una vez en la vida y yo he tenido la suerte de haberlo hecho dos veces (y si alguna desgracia no lo impide habrá más). Como perfecto ejemplo en la plaza nos encontramos con Alvaro y su padre con los que compartímos cena en Grandas y parte de la etapa posterior. Abrazos y fotografías sellaron el comienzo de una amistad que espero que gracias a internet pueda madurar.

De la etapa en sí no describiré nada pues ya que al formar parte del camino francés hay miles de guías y blogs que lo harán mucho mejor que yo. Hoy sólo hablaré de mi impresión personal.

La sensación de hoy fue totalmente distinta que la del resto de las etapas. Fuimos adelantando peregrinos andando cada escasos metros y compartímos km con otros bicigrinos que venían desde Roncesvalles. La soledad del camino primitivo tornó en el sentimiento de grupo del camino francés. Volví a disfrutar de saludar incansablemente a cada peregrino que adelantaba con el añorado "Buenos días. Buen camino". Mañana en el epílogo me centraré en las diferencias entre los dos caminos por lo que hoy no insistiré más en el tema.

Para finalizar una breve reseña sobre el albergue. Escogimos el Seminario Menor por ser el albergue público más cercano al centro. Sin embargo su situación en lo alto de una colina hace que acceder a el sea muy incómodo. Sí a ello sumamos su elevado precio (12€) hace que mi opinión sea no recomendar está opción. Sí se vienen al menos dos personas hay pensiones mucho más céntricas que ofrecen habitaciones dobles por 30€. Basta decir que nos repetimos de nuestra elección cada vez que hoy hemos tenido que subir la colina para llegar al albergue.

Por hoy colina cosa más Agradecer a todos mis amigos y a los miembros del club de ciclismo Riazor los mensajes y llamadas de apoyo. Fueron muy importantes para poder superar el duro reto físico que ha sido este viaje. Un gran abrazo para todos vosotros y vosotras.

domingo, 6 de septiembre de 2009

Etapa 5: O Cadavo - Melide (83 km). Por tierras gallegas

Atrás quedaron los temibles puertos de montaña asturianos y hoy fue una etapa con dificultad moderada que permitió hacer bastantes km.

Hoy intentamos salir temprano pero aunque nos despertamos a las 7 con el desayuno no comenzamos hasta las 8. El trayecto hasta Lugo transcurrió por pistas y corredoiras con pendientes asequibles o de lo contrario cortas por lo que el esfuerzo físico fue moderado. Algunos trozos de bajada bastante técnicos sirvieron para despertarnos totalmente.

Tras Lugo el camino transcurre por carretera hasta unos 15 km de Palas de Reís. En ese punto hay una bifurcacion donde se puede elegir seguir por carretera y pasar por Palas o ir por monte en dirección a Melide (Esta alternativa nos la explicaron al llegar al albergue pues nosotros no la vimos y pensábamos que íbamos a Palas).

El momento emotivo de la jornada vino en este camino hacia Melide. Como creíamos ir hacia Palas nuestras cuentas de km y se nos hacia eterno el camino. La zona era solitaria y hacia muchos km que no veíamos a nadie a quién preguntar. Entonces vimos una pareja en una finca construyendo una casa de madera. Les preguntamos y nos explicaron que habíamos dejado atrás Palas y estábamos a 12 km de Melide. Eran las 3 de la tarde, llevábamos 70 km andados y hacia un sol de justicia. Nuestras caras debieron de reflejar tal cansancio que nos ofrecieron unas cervezas e incluso sí queríamos comer con ellos. Llevábamos bocadillos por lo que la comida no era necesaria pero las cervezas las aceptamos de buen grado. Resulta que esos chicos formaban parte de un grupo de hippies que habían ocupado ese terreno hace tres años y habían restaurado la casa que había allí. Fueron muy hospitalarios y desde este blog les mando un abrazo.

El tramo final hasta Melide vuelve a consistir en corredoiras típicamente gallegas con algún punto divertido en lo que a btt se refiere.

El albergue de Melide es grande y bien organizado. Como únicos puntos negativos que las bicis tienes que quedar fuera y el precio de la lavadora y secadora es abusivo (un lavado más un secado sale en 8€).

Mañana llegaremos a Santiago. Este año no me envuelve la misma emoción que el anterior aunque igualmente será un momento emotivo para recordar. Hoy no me extenderé más en las reflexiones pues prefiero dejarlo para el epílogo.

Buenas noches y bien camino